miércoles, 26 de febrero de 2014

Hesíodo - Trabajos y días

        
   
    
      
     
Otra tercera estirpe de hombres de voz articulada creó Zeus padre, de bronce, en nada semejante a la de plata, nacida de los fresnos, terrible y vigorosa. Sólo les interesaban las luctuosas obras de Ares  y los actos de soberbia; no comían pan y en cambio tenían un aguerrido corazón de metal. (Eran terribles; una gran fuerza y unas manos invencibles nacían de sus hombros sobre robustos miembros.) De bronce eran sus armas, de bronce sus casas y con bronce trabajaban; no existía el negro hierro. También éstos, víctimas de sus propias manos, marcharon a la vasta mansión del cruento Hades, en el anonimato. Se apoderó de ellos la negra muerte aunque eran tremendos, y dejaron la brillante luz del sol.

Hesíodo, Obras y fragmentos, trad. Aurelio Pérez Jiménez y Alfonso Martínez Díez, Editorial Gredos, 2000

1 comentario:

Anónimo dijo...

Interesante,gracias por estos fragmentos.